Según Petón; Garrincha tenía una pierna 6 cm más corta que la otra, tenía diez años y trabajaba cosiendo mangas de seis de la mañana a cuatro de la tarde, tenía la espalda torcida, el vicio del tabaco, la cachaza y el ron. Eso bastaba para que no hubiera corrido como los demás niños, pero como Mané no sabía que tenía todo eso corría más que ellos.
En realidad Garrincha no sabía nada de nada. Cuando a la selección brasileña le hicieron un estudio psicológico antes del mundial de Suecia, Garrincha dio 38 sobre una media de 130. No era tonto, vivía en la despreocupación absoluta; cuando la derrota de Brasil ante Uruguay en el maracanazo mientras que algunos se suicidaban, él se fue a pescar.
Garrincha según el doctor tenía la mentalidad de un niño de 8 años, yo creo que por eso jugaba tan bien al fútbol y transmitía tanta alegria, los niños son los que mejor juegan siempre y a todo...y nunca mienten.
6 comentarios:
Si no leyó y le gusta el fútbol lea esto; http://www.librosgratisweb.com/libros/el-futbol-a-sol-y-sombra.html
A decir verdad ,los niños que no mienten son muy torpes.
Por cierto se descarga al final de página,donde pone HMTL,descargar PDF.Vaya a ser que se ponga a jugar a algo que nada tiene que ver con el fútbol.
Ahora por supuesto los tiempos han cambiado, y aún así los jugadores brasileños y argentinos no son ningunos lumbreras, pero en la época de Garrincha tenían un nivel cultural bajísimo por no decir nulo, ya que provenían de familias muy pobres, pero con un balón en los pies han sido auténticos astros, únicos e irrepetibles. Un abrazo Ramón.
Anónimo el libro de Galeano lo tengo en formato papel y "paseo" por él frecuentemente. Si de verdad está interesado en la literatura del fútbol le aconsejo el de Ángel Cappa, que fuera ayudante de Jorge valdano en el Tenerife: "La intimidad del fútbol".
Lo que quiero decir es que los niños, aunque lo intenten, no saben mentir los descubrimos fácilmente.
Amigo Rafa recuerdo a auténticas lumbreras frente al micrófono: once contra once, fútbol es fútbol, dejarnos la piel...
Un abrazo.
Lamento haberme olvidado, pero vale: el libro que cuenta la anécdota que refiero (modificada por mi)es el de Petón: "El fútbol tiene música" con el que me solazo en la actualidad.
Gracias,muy amable.No se pierda "Cuentos de fútbol" del poeta Federico Díaz Granados,una recopila siete maravillas de grandes autores hispanoamericanos como Rubem Fonseca, Roberto Fontanarrosa, y Mario Benedetti y también ¡Gracias vieja!, la autobiografía de Alfredo Di Stéfano está tan bien narrada.
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