lunes, 14 de julio de 2014

TIEMPOS

Que sepas, amigo, que a medida que los años son cumplidos aumentan las labores cotidianas y disminuyen los tiempos para holgar y disfrutar. Recuerda que el tesoro de la infancia es el tiempo por vivir.

2 comentarios:

Rafa Hernández dijo...

El día que uno pierde ese espíritu de niño que todos llevamos dentro, mal asunto. Lo que ocurre es que en la actual con los problemas que nos azotan, cada vez nos lo ponen más difícil para seguir pensando en esa niñez que desgraciadamente muchos la perdieron hace tiempo.

Un abrazo Ramón.

Ramón Pacheco dijo...

Rafa, no vamos a consentir que nada ni nadie nos enturbie ese espíritu. Es sano, como nos propone Savater, "recuperar la infancia" cada poco.
Un abrazo.