viernes, 15 de abril de 2016

ESCUCHAR

Quintín Quiñones escuchaba tan bien que parecía que entendía lo que le decían. Nadie llegó a saber nunca que era sordo.

2 comentarios:

PACO CUADRADO dijo...

Me malicio que padezco la "sordera" de Quintín Quiñones, que presto tanta atención que algunos se creen que estoy convencido de sus "sermones" dogmaticos.
Cuando en realidad por un oido me entra y por el otro sale sin dejar el más minimo rastro de aprecio en mi sensibilidad Política.
La cruda realidad es que ya me la sudan esos que pregonan las culpas y pecados del contrario, para tapar su propia INSOLVENCIA.
Saludos amigo Galeno.

Ramón Pacheco dijo...

Cuídese el oído don Paco que no está vuesa merced ya para que le coman la oreja.
Saludos.