jueves, 25 de febrero de 2016

EROTISMO

Pensaba que el erotismo estaba en los botones, no en las cremalleras. Por eso nuca aprendió cómo funcionaban.

2 comentarios:

Rafa Hernández dijo...

Lo mejor en esos casos, es llevar un simple sayón por la cabeza.

Abrazo Ramón.

Ramón Pacheco dijo...

Compañero; las cabezas siempre duras...y los corazones calientes.
Un abrazo Rafa.