lunes, 12 de enero de 2015

PENA

El bueno de Melquiades se dirigía con parsimonia al punto de no retorno, de una vida que no sabía si mereció la pena...

2 comentarios:

Rafa Hernández dijo...

A muchos desde luego, no sé hasta que punto les merece vivir una vida entera.

Abrazo Ramón.

Ramón Pacheco dijo...

Cuando hay suerte, compañero, te saltas la parte de la indignidad.
Un abrazo