lunes, 21 de julio de 2008

FEDERICO ¿NOS DEJA?


Borja Mari reflexiona sobre el futuro de Federico
Quieren echar a Federico y quieren echarlo no sólo de la COPE, si no del periodismo. Les contarán, para justificar sus actos, que su tono no es el adecuado, que sus palabras no son las justas, que sus formas, en definitiva, no concuerdan con lo que los obispos entienden como lo políticamente correcto. Pero la verdadera razón es muy distinta, el auténtico motivo de la persecución a la que está siendo sometido Federico es que se ha convertido en un peligro para las fuerzas judeo-masónico-marxistas que gobiernan secretamente el mundo.

Federico no es un simple periodista, es un icono de la libertad y un profeta de la verdad. Si no fuera por él, y el equipo de investigación que capitanea junto a Pedro J., aún seguiríamos pensado que el 11-M fue obra de grupos islámicos, y no se habría descubierto el pacto secreto entre el Gobierno y ETA para desmembrar España. Gracias a él hemos descubierto lo maravilloso que era Mariano Rajoy antes del 9 de marzo, y el horrible monstruo en el que se ha convertido tras perder las elecciones...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Jiménez Losantos tiene un estilo propio que se podrá denostar o aplaudir. En cualquier caso, al que no le guste, que cambie de numerito de dial. En cualquier caso, vale la pena que lo pueda seguir escuchando quien quiera (y el que se sienta perjudicado con sus comentarios que acuda a la justicia ordinaria, que para eso está) que no que, en aras de lo políticamente correcto, se imponga de nuevo la censura. Contra los excesos, justicia, pero no aborregamiento. Y ya que el comentario saca a colación el 11-M, habría mucho, mucho, mucho que opinar tras la sentencia del Supremo. Lo que da auténtica vergüenza es que la mayoría de periodistas y casi todos los políticos, tras esa sentencia que viene a decir que no se ha pillado a nadie de los que lo idearon y a casi nadie de los que lo perpetraron, miren hacia otro lado con el fin de pasar página. Bochornoso.

Anónimo dijo...

Pacheco, si tu eres peor que federico